El sistema operativo de Google va convenciendo a los fabricantes poco a poco. Samsung, Acer y Lenovo ya han presentado portátiles que utilizan Chrome OS y hay nuevas empresas del sector interesadas en disponer de equipos que utilicen el sistema operativo.
La última en añadirse a la lista ha sido HP que ha confirmado su intención de lanzar al mercado durante este mes de febrero un portátil bajo este sistema operativo. El anuncio de HP ha causado sorpresa por el conocido compro,iso que esta compañÃa siempre ha mantenido con Windows en el segmento más comercial aunque para el corporativo ya dispone de equipos bajo distintas versiones de Linux.
El presidente de Acer, Jim Wong, dijo hace pocos dÃas que Chrome OS es "un valor seguro", mientras que la experiencia con el nuevo sistema operativo de Microsoft todavÃa "no es suficientemente satisfactoria". Esta opinión puede parecer aventurada ya que Chrome OS aún no ha demostrado ânadaâ en el mercado aunque mientras que Windows cuenta con una enorme base de usuarios fidelizados por âobligaciónâ o âdevociónâ .
Sin embargo, el cambio en la interfaz de Windows 8 ha abierto la caja de Pandora y podrÃa provocar que millones de usuarios se encontrasen como novatos utilizando un sistema operativo al que están familiarizados…. Quizás esta sea la gran oportunidad para Chrome o incluso otros sistemas operativos que llevan años como eternas promesas.
Trabajando en la nube o en redes locales
Chrome OS es un sistema operativo basado en la nube. Las aplicaciones no están instaladas en el equipo salvo aquellas necesarias para su arranque. Algunos lo consideran como una versión moderna de los antiguos âPCs clientesâ muy populares en los entornos corporativos durante los 80 y los 90 y que fueron paulatinamente sustituidos por los PCs. La diferencia es que en lugar de conectarse a una âred corporativaâ para trabajar contra el servidor, se conectan a Internet y a las aplicaciones alojadas en la nube.
Sin embargo, también podrÃan trabajar en un entorno de red local lo que les harÃa ideales para el sector educativo y empresarial, preocupados por la seguridad, virus, códigos maliciosos o filtraciones de información reservada,
Más baratos
Aunque los primeros equipos que llegaron al mercado no destacaron por su precio económico, la realidad es que estos precisan menos potencia y requerimientos técnicos que aquellos basados en cualquier versión de Windows,
No llevan disco duro, bastándose con su memoria interna, ni lector de CDs. Un procesador ARM o Atom ofrece una buena experiencia al usuario sin lentas esperas a las ejecuciones de los programas o la sensación de que el ordenador no responde cuando carga una aplicación.
Y en un momento en que los fabricantes libran una feroz batalla comercial en el que los precios son cada vez más bajos, estos equipos representan una buena opción sin sacrificar más los márgenes.
Y aunque Chrome OS aún está poco desarrollado, los mismos fabricantes son conscientes de que popularidad facilitará la llegada de más y más herramientas, además del compromiso de Google para sacar adelante este sistema como ya está haciendo con Android
Quizás estos sean los motivos que han llevado a HP a apostar por este mercado o el que provocó que el presidente de Acer dijera en una entrevista que cree en el éxito de Chrome OS y no tanto en el de Windows 8 en el segmento móvil.
Por de pronto, mientras prepara el lanzamiento de nuevos Chromebooks, Acer ha retrasado el lanzamiento al mercado de dispositivos con Windows 8 RT mientras apuesta por los equipos de Google como âalternativaâ al sector educativo.
Las dudas sobre Windows 8 van mucho´más allá de la apuesta por Chrome OS. Jim Wong explicaba que pese a la fuerte apuesta que han realizado los fabricantes por la nueva versión del sistema operativo de Microsoft las ventas no han aumentado tras su lanzamiento, lo que para él es âuna forma sencilla de juzgar si ha tenido éxito o no". Una opinión que parecen compartir algunos analistas que valoraron negativamente los resultados de Microsoft del último trimestre debido principalmente a que el empuje de la llegada de Windows 8 no ha supuesto una ârevoluciónâ como si fue en otras ocasiones.