Un equipo de investigadores chinos ha desarrollado un sistema de impresión que utiliza agua en lugar de tinta gracias a un papel especial que cambia de color mientras está húmedo.
Los creadores han explicado que con esto pretenden contribuir a la lucha contra el calentamiento global y el deterioro medioambiental, ya que, según han señalado en declaraciones a Nature Communications, «el exceso de consumo de papel provoca la deforestación».
El profesor de la Universidad de Jillin Sean Zhang ha explicado que el papel es reutilizable porque se puede escribir sobre él y borrar el contenido varias veces. El papel se fabrica con tintes que se revelan al mojarse y cada hoja puede reutilizarse 50 veces.
Los científicos rellenaron los cartuchos de una impresora convencional con agua e imprimieron sobre el papel especial. También hicieron prueblas rellenando un bolígrafo con agua para obtener escritura manual de la misma forma.
Las impresiones duran 22 horas y se pueden hacer en cuatro colores diferentes. Según los creadores, la calidad de la impresión con agua es comparable a la de tinta.