La recesión en España constituye una oportunidad para los operadores móviles virtuales y les ayudará a ganar cuota de mercado en línea con su avance en los otros países europeos, dijo el viernes Miguel Ángel Suárez, director general de operaciones de KPN en España. Seguir leyendo el arículo
Agencias - "En otros países europeos, los operadores virtuales han llegado a una cuota de mercado del 10 al 12 por ciento y nuestras proyecciones (para España) se basan en estas cifras", dijo Suárez, que dirige la entrada del operador holandés en el mercado español, en una entrevista con Reuters.
"Esto sería equivalente a unos 4 millones de abonados en España", explicó Suárez.
A finales de diciembre, la docena de operadores virtuales presentes en España contaban en su conjunto con algo más de 900.000 clientes, equivalente a una cuota de mercado del 1,8 por ciento, según datos de la CMT.
KPN, que lanzó sus operaciones en España hace un año, es uno de los principales operadores alternativos en este grupo, con unos 150.000 clientes a través de su marca de bajo coste Simyo y su marca Blau, que cuenta con 5.000 puntos de venta.
"Las cifras de venta se van acelerando a lo largo del año. Todas las marcas virtuales han sumado una cantidad relevante de clientes y van haciendo un hueco en el mercado", dijo Suárez.
Pero el responsable de KPN en España dijo que las prácticas comerciales de los operadores establecidos -- Telefónica, Vodafone y Orange -- frenaban la migración de los clientes hacia los operadores alternativos.
"Es difícil competir con mercados con terminales bloqueados, ventas de terminales muy subvencionados, contratos de permanencia de 18 meses e incluso de 24 meses a la hora de comprar o renovar un terminal", dijo Suárez.
El responsable de KPN en España dijo que los operadores alternativos se han dirigido a los reguladores -- la Comisión Nacional de Competencia (CNC) y la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) -- para que controlen estas prácticas.
"Los operadores establecidos trabajan con posición de ventaja", dijo.
Los tres grandes controlan juntos algo más del 96 por ciento de un mercado que factura unos 19.000 millones de euros al año y fidelizan a sus clientes con terminales fuertemente subvencionados.
No obstante, Suárez dijo que los nuevos operadores ofrecen descuentos de hasta el 50 por ciento sobre el precio de las llamadas de los competidores establecidos, lo que debería constituir un buen argumento para cambiar de operador en momentos de crisis.
"La crisis ayuda. En el fondo nuestra propuesta es un descuento significativo en la factura de tu movil", dijo.
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