¡Se acabó lo que se daba!, Tuenti, ha borrado el perfil de miles de adolescentes siguiendo las indicaciones de la APD.
Las «tesis» conservadores se imponen en todos los rincones del mundo. Tanto da que el Gobierno sea de izquierdas o de derechas, bajo la excusa de la protección de la infancia, los poderes intentan limitar el derecho de los adolescentes a expresarse y comunicarse libremente.
Que los menores se queden sin Tuenti no evitará que estos sigan creando sus propios espacios de libertad en la red. Aún tienen «fotolog» y decenas de foros ampliamente poblados por menores en donde se expresan libremente sin la «supervisión» de los poderes fácticos de la sociedad.
La Internet hispana ha perdido una oportunidad única para encauzar el interés de millones de adolescentes en la comunicación social. Los cierres, las censuras y prohibiciones nunca, y eso se ha demostrado ampliamente, consiguen sus objetivos. Es más, siempre suelen provocar el efecto contrario aumentando el interés por acceder a todo aquello que está prohibido.
Educar y formar a los niños y adolescentes es un reto que parece haber perdido nuestra sociedad. Y mientras no tratemos a los niños y adolescentes como personas inmersos en un mundo cambiante y contradictorio, cualquier medida que tomemos estará condenada al fracaso. Y es que nadie puede tapiar el inmenso mundo que es Internet.
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