Cuando vamos a comprar un móvil solemos fijarnos mucho en las características que nos ofrece y si el terminal es o no de marca para tener la garantía que lanzarán actualizaciones de forma habitual: Si compramos un terminal como el mío un Jiayu S3 por 160€ con LTE, 3GB de RAM, 16GB internos y 13Mpx y dual SIM, uno es consciente que probablemente no tendremos actualizaciones fáciles a Android 6 pero al menos el producto comprado en China nos ha salido barato.
Sin embargo cuando un fabricante como BQ promete que sus terminales se actualizarán a Android 5.1 sin coste, el cliente acepta pagar más dinero por tener el respaldo de un fabricante y la noticia de que el propio BQ se rinda y decida cambiar sus móviles de MEDIATEK a QUALCOMM al considerar que Mediatek no le ayuda a actualizar sus terminales a versiones de Android superiores no es algo que reciben muy contentos sus clientes que iniciado una guerra.
Por su lado BQ se compromete a compensar a los clientes con un bono de 50€ de descuento en la compra de un nuevo terminal pero ¿Confiará un cliente en un fabricante que le ha fallado? ¿Le servirán las explicaciones que ha ofrecido? De momento los clientes que tengan los modelos Aquaris E5 FHD, E6 y E10 no recibirán nunca una actualización tal como ha comentado la propia compañía. A partir de ahora contarán con procesadores Qualcomm, un mayor coste que espero no implique subidas excesivas en los precios de venta si quieren mantener su cuota de mercado.
Personalmente creo que no es cuestión solo de elegir una marca u otra de procesadores sino que deberían haber blindado un contrato con el fabricante que obligará a lanzar actualizaciones para que BQ pudiera actualizar de forma correcta los terminales. Quizás BQ nunca pensó que sería algo que harían si o si antes de perder el cliente, pero para MEDIATEK quizás no sean lo suficientemente grandes como para ceder. De todas formas esperemos que BQ acierte apostando por procesadores Qualcomm.
