Comic-Con, la mayor convención de cómics en Estados Unidos, se inauguró en San Diego

Será presentada la cartelera de Hollywood para los próximos meses.

Queda poco de cómic y mucho de cine en los pasillos del centro de convenciones de San Diego en esta multitudinaria feria a caballo entre un baile de disfraces y la campaña publicitaria más importante, junto con la de los Óscar, para la industria del cine.

Lo que comenzó hace 37 años de la forma más modesta, una reunión de apenas 300 aficionados en los sótanos del hotel US Grant de San Diego, es ahora una de las principales muestras cinematográficas del mundo donde, a diferencia de los premios de Cannes o del prestigio de Sundance, lo que se busca es el interés de los aficionados.

La Comic-Con es una reunión del orden de 123.000 personas -ese número asistió el año pasado- con pasión por el cine.

De ahí que los estudios hayan duplicado con los años su presencia en este foro otrora dedicado a revistas y donde ahora los cómics másvisibles son aquellos en los que se va a inspirar el próximo taquillazo de Hollywood. El más claro está en la saga del Hombre Araña, una de las franquicias más millonarias de la pantalla.