Creador de Word y Excel viaja al espacio tras pagar 20 millones de dólares

charles SimonyiUno de los artífices del éxito de Microsoft, Charles Simonyi, será el quinto turista en órbita tras pagar una millonaria cantidad.

Charles Simonyi no se imaginaba cuando era un adolescente inclinado en su Hungría natal sobre un ordenador soviético, que un día sería pionero de Microsoft, multimillonario y que acabaría por ser un turista del espacio.

Este informático de 58 años, coautor de Word y Excel, productos emblemáticos de la firma de Bill Gates, tiene ahora conciencia de su destino extraordinario, que empezó en Budapest cuando era guarda nocturno de un laboratorio informático.

Allí aprendió a usar un ordenador Ural-2, una de cuyas cintas de papel (que servían para almacenar datos) llevó este sábado a bordo de la Estación Espacial Internacional (ISS).

Si bien Estados Unidos lo hizo rico, fue otra tecnología soviética, el cohete Soyuz, la que lo propulsó al espacio desde el cosmódromo ruso de Baikonur, en Kazajistán.

«En el museo de Baikonur vi un Ural-1, que es casi como el Ural-2 (…) y pensé que el círculo se cerraba, que estamos de vuelta hacia el futuro. Pienso que es genial», confesó el miércoles durante un paseo en el centro de preparación de cosmonautas.

Cuando era adolescente, sin embargo, su «sueño» no era ir al espacio sino «salir de Hungría y emigrar al Oeste». Su pasión por el cosmos sólo empezó hace poco tras haber asistido a lanzamientos en Cabo Cañaveral, el centro espacial norteamericano.

En 1968, a la edad de 20 años, emigró a Estados Unidos y estudió en la prestigiosa universidad californiana de Berkeley, de donde salió con un diploma de ingeniería y de matemáticas.

En 1981, al ser contratado por Microsoft -por entonces sólo una ‘start-up’ de la costa oeste de Estados Unidos-, Simonyi entró definitivamente en la vía del éxito, la fortuna y… las estrellas.

Naturalizado estadounidense, se impuso como uno de los arquitectos de los programas que dieron renombre a la firma de Seattle, que terminó dejando en 2002 para fundar su propia empresa, la Intentional Software Corporation.

Simonyi, que además es piloto de avión y de helicóptero con muchas horas de vuelo, explicaba horas antes del vuelo que espera ahora enriquecer su experiencia con los que considera los dos momentos más esperados del viaje: la vista del planeta azul y la sensación de ingravidez.