Tras años de subidas en las ventas apoyadas en cintas de vídeo, DVD e Internet, la industria de películas para adultos se está viendo retada por páginas en las que se comparten vídeos fácilmente y que ofrecen contenido explícito de manera gratuita.
"Estamos ante una piratería rampante, toneladas de contenido gratuito", declaró Steven Hirsch, cofundador de Vivid, los estudios más conocidos de películas de sexo.
Vivid llegó a obtener el 80 por ciento de sus alrededor de 100 millones de dólares anuales de las ventas de DVD, pero el año pasado cayeron al 30 por ciento, explicó en una entrevista.
El reto de Internet, tratado en la feria de películas para adultos celebrada esta semana en Las Vegas, ya se ha presentado a la industria musical y a otras actividades de ocio.
Una gran parte de la competencia en la Red para el mundo pornográfico en EEUU, que tiene su sede sobre todo en el sur de California, proviene de páginas como la canadiense XTube.com, con un formato basado en YouTube, de Google.
Algunos de sus vídeos son de estudios comerciales, otros los ponen aficionados.
La web tiene unos 200.000 vídeos gratuitos, la mayoría de entre 30 segundos a dos minutos, y alrededor del uno por ciento compra DVD o vídeos, lo que supone millones de dólares de ingresos anuales, según su director de ventas, Curtis Potec. Unos dos tercios de sus internautas son gays, aseguró.
"Montones y montones de personas nos dicen que este es el futuro de la industria para adultos", dijo Potec. "La mayoría del dinero es por los anuncios en cualquier página".
Adult Entertainment Broadcast Network (AEBN) comenzó hace año y medio generando ingresos en su web mediante la publicidad y el desvío de tráfico hacia páginas de pago por minuto. Los clips gratis son de tres minutos.
"Hay una línea muy delgada entre dar algo pequeño, algo que te incite (...) y darlo todo", manifestó su presidente, Scott Coffman.
Ahora se enfrenta a una demanda de Vivid, que les acusa de piratería y asegura que demandará a otras páginas de Internet.
Algunos ejecutivos de la industria de cine adulto dicen que una posible solución podría ser alcanzar acuerdos de distribución con grandes compañías como AT&T, Verizon Communications, Comcast o Apple
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