Con el objetivo de sobrevivir a los cambios relacionados con los temporizadores y, al mismo tiempo, enfocarse hacia la virtualización, el ingeniero de software Linus Torvalds acaba de publicar la última versión del núcleo de Linux, bajo el número 2.6.21.
La novedad de la actualización radica en un mecanismo llamado Dynticks –desarrollado por encima de los eventos de reloj o clockevents–, que permite unificar el manejo de los temporizadores y ofrece una alta resolución para estos elementos.
Además, la nueva configuración incorpora soporte para VMI (Virtual Machine Interface) y el software KVM, los dos aptos para la paravirtualización que se utilizará en VMWare.
Igualmente, el software KVM también es útil para la suspensión y recuperación de los sistemas.
Otras de las mejoras introducidas por el especialista finlandés incluyen una mayor línea de parámetros del núcleo y soporte para el ingenio de Toshiba basado en el Cell.
Asimismo kernel 2.6.21 integra escrituras en UFS2, kprobes para PPC32, kexec y un perfil oprofile para ARM.
Por último, ofrece un cifrado de clave pública para ecrypttfs, algoritmos de cifrado FCrypt y Camilla, modos de auditoría ‘lockdown’, a los que se suman algunos controladores nuevos y mejoras adicionales.