Los pioneros en introducir los libros electrónicos en las grandes superficies catalanas ha sido Mediamarkt, que hizo una primera prueba piloto en su centro de Pamplona en julio del año pasado y, convencidos por los resultados, fueron introduciéndolos en el resto de sus tiendas españolas.
Agencias - "Hemos vendido dos, y tenemos alguno apalabrado", comentó a Europa Press el responsable de la Llibreria 22 de Girona, Guillem Terribas, centro pionero en poner codo con codo en sus estanterías los libros de papel y los de batería.
Los pioneros en introducir los libros electrónicos en las grandes superficies catalanas ha sido Mediamarkt, que hizo una primera prueba piloto en su centro de Pamplona en julio del año pasado y, convencidos por los resultados, fueron introduciéndolos en el resto de sus tiendas españolas.
Según fuentes de Mediamarkt en Catalunya consultadas por Europa Press, de acuerdo a la baja demanda, en cada tienda sólo tienen dos ejemplares de cada uno de los modelos que comercializan: dos de la marca I-Rex y uno de la marca Booken.
POCA COMERCIALIZACIÓN
Otras empresas como El Corte Inglés y Fnac aún no venden libros electrónicos, conocidos también como e-books, pero están valorando hacerlo, según reconocieron fuentes de ambas compañías a Europa Press.
"Los periódicos hace 20 años que dicen que los libros desaparecen con la llegada de nuevas tecnologías, pero yo lo que veo es que desaparecen los periódicos y los libros aún funcionan", espetó Terribas, que reconoció haber sido "muy escéptico" con leer en pantalla, pero ahora le canta las alabanzas.
"No pesa, ocupa como un libro, tiene pantalla mate de tinta electrónica y sin luz para no cansar la vista, y se puede elegir el tamaño y el tipo de letra", enumera el librero.
Mediamarkt añadió que se trata de una alternativa "barata, cómoda y más ecológica", pero de momento poco implantada en este mercado porque hay "mucha gente que aún no la conoce".
EN CATALAN DESDE MARZO
El modelo que vende la Llibreria 22 incluye un cupón de descarga de 50 títulos, en su mayoría "clásicos por los que no hay que pagar derechos de autor" y, en todo caso, no en catalán, porque no los hay.
El debut en catalán será durante la primera quincena de marzo, cuando las editoriales Cossetània, Angle y Bromera lanzarán por 'Edi.cat' cinco títulos en digital de su fondo bibliográfico: Angle publicará 'Contra la fam i la guerra', 'Un altre món' y 'El meu camí cap a la utopia', de Arcadi Oliveres; y 'La meva llibertat' y 'La meva veritat', de Octavi Fullat.
Cossetània ofrecerá 'El viatge de Rudy', de Ramon Aymerich y Ester Romeu; 'La catosfera literària', de varios autores; '100 maneres de descobrir un crim', de Moisés Peñalver Núñez; 'Vilaniu', de Narcís Oller, y 'El vertigen del trapezista', de Jesús M. Tibau.
MÁS LIBROS EN CATALÁN
La valenciana Bromera publicará 'El soroll de la resta', de Francesc Bodí, 'Plagis', de Urbà Lozano, y 'Encara no m'estimes', de Johnatan Lethem. 'El col·leccionista de fades', de Josep Ballester y 'El pou i el pèndol', de Edgar Allan Poe, completarán esta primera biblioteca digital catalana.
Los libros electrónicos costarán entre un "60 y 70 por ciento" de lo que cuestan sus versiones en papel, y la idea es que en un futuro próximo las novedades ya se publiquen simultáneamente en digital y papel, explicó a Europa Press un responsable de 'Edi.cat'.
La web está funcionando internamente desde el 1 de febrero pero hasta un mes después no se abrirá al público porque al ser una iniciativa pionera saben que tendrán "problemas" y "retoques que hacer".
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