El videojuego creado por la ONCE se basa en el reconocimiento de los sonidos y está disponible en cinco idiomas: español, catalán, gallego, vasco e inglés.
Zoe, es una joven estudiante de geología que trabaja en una mina recogiendo muestras. De golpe, una gran grieta se abre en medio de un terremoto y cae al vacío, arrastrando con ella a su robot asistente Bubot.
Recuperada de la caída se da cuenta de que está en medio de una civilización desconocida, con hormigas de tamaño humano. Deberá interactuar con sus nuevos amigos y superar una infinidad de pruebas para poder volver a su mundo.
Al ocurrir el juego a oscuras, las personas ciegas juegan, prácticamente, en las mismas condiciones que los jugadores que no tienen problemas de visión, pues todo el videojuego ocurre a oscuras. Aunque no es el primer videojuego para personas invidentes, si es el primer videojuego que podrán jugar tanto personas ciegas como personas sin deficiencias visuales, gracias a su tecnología en tres dimensiones y el reconocimiento de los sonidos.
