Como todos mis lectores sabéis no me basta con hacerme eco de una noticia, sino que me gusta explicar sus consecuencias en el sector y los motivos que llevan a un operador a tomar estas decisiones tan perjudiciales para nuevos clientes. En este caso ORANGE sigue el ejemplo de YOIGO que no permite comprar un móvil a plazos si un cliente no proviene de otro operador de contrato, aunque de forma menos radical.
ORANGE si el cliente viene de prepago o contrato (es una portabilidad) si le permite la compra a plazos de sus terminales; es decir que el cliente que nunca haya tenido telefonía móvil tendrá que contratar los servicios de ORANGE pagando el terminal en el momento, no adquirir terminal adquiriendo-lo en otra tienda que le permita la compra a plazos o tendrá que irse a otro operador. Curiosamente MOVISTAR será entonces la única operadora que ofrezca pago a plazos a clientes con alta de nuevo número.
En la práctica se trata de buscar el cliente rentable y sobre todo evitar el fraude de un cliente que solicita el alta de una linea con un terminal a plazo y luego no paga sus facturas dejando una deuda no solo del servicio de telefonía sino un impago sobre el terminal que en muchos casos puede ascender a más de 500€ lo cual si bien puede acudirse a los juzgados a reclamarlo civilmente, a menudo resultan insolventes y no consiguen recuperar la deuda.
La operadora Vodafone a diferencia de Orange y Yoigo si que permite el pago a plazos aunque diferencia el coste de la cuota según el tipo de cliente para luchar contra este fraude y de esa forma incrementa su margen de beneficio. Si por ejemplo el impago es del 14% en nuevas altas sin portabilidad, si el cliente viene de contrato le hace un mayor descuento al saber que es un cliente más fiable.
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