La actuación policial vino provocada tras una denuncia de Nintendo por violación de propiedad intelectual.
En una acción sin precedentes la policía judicial francesa incautó miles de cartuchos vírgenes para Nintendo DS. Estos cartuchos son utilizados para almacenar los juegos descargados de Internet y se comercializan bajo distintas marcas como el SuperCard DS, DS Linker, R4, etc.
Las intervenciones de cartuchos se realizaron tanto en mayoristas como en comercios que vendían directamente al público los cartuchos. Los que se salvaron de la operación bloquearon de inmediato las ventas de este tipo de productos guardándolos para una mejor ocasión.
Fuentes del sector están convencidos de que la actuación busca frenar la venta de estos cartuchos durante la campaña navideña y animar así la distribución de cartuchos originales. Gran parte del éxito conseguido en Francia por la NDS se debe a la facilidad de «copia» de sus juegos a través de estos cartuchos que pueden comprarse en comercios o a través de la red a 30 euros como máximo y con capacidades de hasta 2 GB.
Nintendo acusa a los vendedores y fabricantes de estos dispositivos de violar su propiedad intelectual y piratería. La compañía argumenta que estos soportes incluyen código informático de su propiedad, necesario para que sea reconocido por la DS y pueda ejecutar los datos almacenados.
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