Se mojó tu smartphone? Para algunos de gama alta no es un problema, pero para otros es una maldición. Sigue estos simples consejos para solucionarlo.
Seguramente, por descuidos tontos, ya te pasó más de una vez. La primera, no se mojó mucho y siguió funcionando; y la segunda, ha dejado defectuoso o ha malogrado de por vida a tu querido smartphone. Por ello, te brindamos algunos consejos para estos casos.
1. Apágalo: Inmediatamente después del accidente debes apagar tu smartphone. Ayudará a prevenir que el agua entre en contacto con la tarjeta activa y pueda quemar los circuitos. Algo catastrófico.
2. Sécalo: Es lo primero que haces, pero hazlo bien. Abre el dispositivo y saca la batería, la tarjeta SIM y cualquier otro componente suelto. Con una toalla seca cada pieza por separado. Asegúrate que no quede ni una sola gota por fuera.
3. Ingrediente mágico: Mete el dispositivo en una bolsa sellable con unos 10 sobres de gel de sílice. Si no sabes qué son, son aquellos mismos que encuentras en farmacias o boticas, parecen sobrecitos con sal adentro utilizados para erradicar la humedad.
4. Espera lo suficiente: El dispositivo debe estar en la bolsa alrededor de 72 horas (hablamos de un dispositivo que se ha sumergido completamente en el agua), el gel de sílice absorberá todo el agua sin dañar el teléfono. Algunos también utilizan arroz como ingrediente.
5: Cruza los dedos: Olvídate de la garantía porque la mayoría de fabricantes no la ofrecen cuando se trata de daño por agua; y ellos tienen sensores que sabrán que fue mojado. Algunos smartphones de gama alta son resistentes al agua, como el Galaxy S5 o Xperia, pero si tu móvil es de gama media o baja no te confíes y ten más cuidado.
