En los últimos días, unas pocas firmas privadas han firmado acuerdos de confidencialidad o han aceptado reuniones con la compañía para tener acceso a sus libros de cuentas, dijeron las fuentes, y añadieron que el proceso de venta comenzaría en unas semanas. Por su parte, BlackBerry declinó hacer comentarios.
Fuentes del sector han dicho que varias de las más grandes firmas privadas y algunos de los fabricantes asiáticos de hardware decidieron no ir en busca de BlackBerry. Sin embargo, están a la espera de ver como se desarrollan los acontecimientos para hacerse con la propiedad de la división móvil una perita en dulce para algunos, un agujero sin fondo para otros.
Y es que según ha trascendido entre los interesados con hacerse con el control de la firma canadiense están valorando negativamente el negocio de Hardware y plantean la posibilidad de venderla o cerrarla. Las bajas ventas de los nuevos dispositivos que llegaron al mercado tras una campaña apoyada por la opinión muy positiva de expertos demuestran, en su opinión, que el coste de reposicionar la marca entre los consumidores supondría una inversión además de elevada, arriesgada. Constatan también que el hecho de Microsoft se haya hecho con Nokia ennegrece aún más su futuro.
Y bajo estas condiciones descuentan el coste que supondría cerrar Blackberry móviles (unos 2000 millones de dólares) en las ofertas presentadas. Esta situación es la que ha provocado que algunos fabricantes asiáticos estén negociando directamente con los posibles compradores en lugar de presentar una oferta por la compañía.