Permite compartir documentos y trabajar colaborativamente sobre ellos sin tener que recurrir a software o servicios online de terceras partes, convirtiendo nuestro navegador web en un mini-servidor.
Guillem Alsina ([email protected]) – La compañía noruega Opera Soft lo ha vuelto a hacer: nuevamente, ha incorporado una funcionalidad rompedora en su navegador web, no vista hasta ahora en ningún otro browser de la competencia. Esta empresa ya fue pionera en la introducción de las pestañas para tener abiertas varias páginas web en la misma ventana del navegador, en la página de inicio con las miniaturas de los favoritos o las últimas páginas vistas, y en la opción de reabrir el navegador en el mismo estado con el que se cerró en la anterior navegación, novedades que el resto de browsers han ido adaptando. Unite es el nombre de una nueva funcionalidad que permite compartir documentos y aplicaciones convirtiendo al mismo tiempo nuestro navegador en un servidor web.
Unite consiste en un componente de software que debe ser descargado e instalado en Opera 10 para proporcionar dicha funcionalidad. Ya hay una versión alpha para descarga, disponible para Windows, Mac OS X y Linux. Lo que se instala es este micro-servidor empotrado en el navegador.
Opera Unite es extensible mediante una API que permite la creación de aplicaciones que aprovechen los recursos de compartición que proporciona. La misma compañía pone a disposición de los usuarios un sistema de compartición de archivos, una aplicación para publicar fotografías y compartirlas remotamente, un software de chat, y naturalmente puede aprovecharse la función de servidor web para servir páginas web. Esta última funcionalidad puede ser muy útil para los diseñadores de sitios web que no tengan conocimientos de programación o administración de sistemas, ya que les permitirá disponer de un servidor web muy simple y básico en su máquina sin requerir un gran esfuerzo de configuración.
La participación de terceras partes en el desarrollo de mini-aplicaciones para Opera Unite será un factor clave en el futuro de esta tecnología. De hecho, la potencia del sistema es muy grande, ya que desde el mismo fabricante noruego afirman que se puede llegar a programar el control remoto de un vehículo vía web.
Pese a todas las ventajas, abrir un servidor web en nuestro sistema informático siempre supone añadir un riesgo más de seguridad a este. No estoy diciendo que con ello vayan a penetrar nuestras defensas e infectarnos con un virus, pero sí que las posibilidades de algún tipo de vulneración de la seguridad se amplían ni que sea ligeramente. Sería como abrir una nueva ventana a un edificio: aunque fuera en un quinto piso, siempre será una nueva oportunidad para que un ladrón se infiltre si encuentra algún agujero de seguridad que le permita abrirla desde fuera.
Para utilizar Opera Unite será necesario disponer de una cuenta Opera, que se puede conseguir gratuitamente dándonos de alta en cualquier servicio de la compañía noruega como por ejemplo My Opera, teniendo también la oportunidad de darnos de alta desde el mismo proceso de login de Opera Unite.
Opera: una compañía a contracorriente
Pese a contar con un buen producto como su navegador, la compañía noruega no goza del favor del público, ocupando menos del 1% de la cuota total de mercado*, y viéndose superada por una recién llegada como Google, que con Chrome ha conseguido encandilar a poco menos del 2% de los internautas. Es un ejemplo típico de una muy buena labor apenas apreciada por el público en general, y viéndose la compañía noruega ofuscada por una guerra protagonizada por dos pesos pesados como son el Internet Explorer de Microsoft y su alternativa libre, Firefox, con apariciones estelares del Safari de Apple (como en su reciente versión 4) y del Chrome de Google. Con menos medios para publicitarse, Opera está sufriendo las consecuencias de la preeminencia de otras compañías con mayores medios a su alcance, sin que ello signifique que sus productos sean superiores a los de la noruega.
Esta situación se invierte en los campos de la telefonía móvil y los dispositivos empotrados, en los que Opera Soft goza de una excelente salud, pese a que por el momento estas ofertas constituyen un mínimo de los dispositivos utilizados para acceder a la Red de redes, y se pasa menos tiempo ante ellos que ante el navegador de una computadora desktop. La continuidad del Opera de sobremesa estaría, en mi opinión, vinculada a un buen resultado de las operaciones financieras de la compañía, lo que en estos momentos parece no ponerse en duda. Las acciones de esta compañía no han parado de subir en el último lustro, estando actualmente en uno de los puntos más álgidos de su historia desde mediados de 2006. Opera, pues, parece ajena a la crisis global.
El navegador Opera para máquinas de sobremesa es un producto estratégico, una presencia que la compañía noruega debe mantener y que espera ampliar con funcionalidades tan potentes como Unite, pero que si no recibe tanto reconocimiento por parte del público como el resto de su porfolio, no es tan grave.
* un 0,72% según las estadísticas de Net Applications correspondientes a mayo de 2009, en las que Opera se vio incluso superado por Netscape, un navegador web que desde hace tiempo no está siendo actualizado.
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