Trabajo: Las empresas pasan de contratar a la generación facebook

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Nunca en los últimos años la nueva generación de jóvenes había tenido tantos problemas para ingresar en el mercado laboral. Algunos expertos dan por hecho de que son "victimas" de la crisis, otros que existe una gran desconfianza por parte de los reclutadores hacía esta generación y sus habilidades.

Las recientes cifras publicadas por el Departamento de Trabajo de Estados Unidos fueron buenas noticias para muchos -el desempleo total se mantuvo en 6,7%- pero continuó pintando un panorama sombrío para la camada de veinteañeros que están entrando en el mercado laboral.

La tasa de desempleo para los que están entre los 20 y 24 años llegó a 12,2% mientras que para el sector entre 16 a 24 años la cifra fue 14,5%.

¿Qué esta sucediendo?.

Sociólogos y expertos en el mercado laboral buscan encontrar una explicación a esta situación que se aparte del tópico de la crisis económica.

"El desempleo ha incidido sobre todas las capas de la población afectando principalmente a aquellos más veteranos y con mayor salario", explica un experto... "pero ahora parece ser particularmente grave entre aquellos que buscan su primer empleo o están introduciéndose en el mercado laboral", recalca.

Tim Donovan, escribió en la revista Salón, que nos encontramos con extenso grupo demográfico de "jóvenes, pobres, con poca educación y casi siempre de sectores minoritarios" que no pueden encontrar trabajo. Estos, serían parte del problema.

Por su parte Walter Russell Mead, incide en una de las cuestiones que más preocupa a los reclutadores a la hora de afrontar una nueva selección de personal, la autocomplacencia. Ellos "piensan que se pueden quedar sentados sin hacer nada hasta que el gobierno o la economía le ofrezcan un puesto en una oficina de nueva a cinco", escribe en su blog para American Interest.

No son interesantes para las empresas

Un estudio realizado por la empresa de empleo y contratación Adecco encontró que los administradores de personal tienen tres veces menos probabilidades de contratar a un veinteañero que a un trabajador maduro porque estiman que el empleado más viejo será más "responsable" y "profesional".

"Los de la generación del milenio tienen de por sí una mala reputación de "incapaces de desarrollar su potencial, maniáticos de los medios sociales y auto fotografías 'selfies'", escribe Seth J Carr en el diario Chicago Tribune.

Muchos de  los jóvenes graduados han sido educados por sus padres y el propio sistema bajo la idea de que podrán conseguir el sueño americano de conseguir el trabajo perfecto o liderar una empresa exitosa. Hasta ese momento se emplean en trabajos free-lance rehusando participar en un mercado laboral que creen aburrido y poco motivado.

No son pocos los expertos que atestiguan que esta generación se ha "autoapartado" del mercado laboral al no aceptar las reglas propias del sistema y creyendo que sus habilidades en las redes sociales serán las que les abrirán la puerta al paraíso. "Viven en paralelo al sistema, lanzando todo tipo de iniciativas de las que pocas sobreviven. Vivir al día es algo más que una manera de subsistencia, se ha establecido como una norma entre estos sectores" cita un experto, poniendo como ejemplo el auge de microblogs, instagrameres, tuiteros y otras formulas parecidas que les otorga un grado de notoriedad mucho más importante del que realmente tienen.

Sin embargo, como mayor peso adquieren, mayor es también el grado de desconfianza de las empresas hacía ellos. Los típicos tópicos sobre su falta de responsabilidad,  endogamia y el poco espíritu de trabajo en equipo pesan en su contra.

Jewelyn Cosgrove, una representante de esta generación, escribe en Policy Mic que "Nos hemos visto frustrados, pisoteados y calumniados por los medios pero conservamos la esperanza", en un futuro mejor.

Quizás se cumplan las esperanzas de Cosgrove pero hasta ese momento un gran número de jóvenes seguirá aumentando las listas de paro y se encontrará con problemas para que las empresas confíen en ellos.