El grupo pide a la Unión Europea que cambie su decisión o reduzca el importe
Por fin, el primer fabricante mundial de chips ha salido al paso de la multimillonaria multa impuesta por la Comisión de la Competencia de la UE declarando que, en su opinión, fue un error.
En su alegación, afirma que la CE no aportó pruebas suficientes para sustentar sus acusaciones de que la compañía usaba tácticas ilegales para competir con AMD.
Según la CE, Intel ofrecía pagos en metálico y descuentos a aquellos fabricantes y comerciantes que optasen por sus productos en lugar de los de su competidor. Además de multarla le obligaba a cesar en este tipo de actividades.
Intel considera que la política de descuentos es algo habitual en el mundo comercial y que en ningún momento estos se hicieron para perjudicar a AMD o a los consumidores, que se beneficiaban al conseguir de esta manera mejores precios en sus equipos.
Por otra parte, argumenta que no pudo tener acceso a los documentos suministrados por AMD a la Comisión y que fueron determinantes ante la sanción. Esta situación la coloco en una posición de indefensión, concluye el grupo estadounidense.
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